lunes, 30 de enero de 2012

Robert Schuman(1886 - 1963)


El estadista Robert Schuman, competente abogado y Ministro de Asuntos Exteriores francés entre 1948 y 1952, es considerado uno de los padres fundadores de la unidad europea.

Schuman nació en Luxemburgo en el seno de una familia francoalemana, a pesar de su experiencia en la Alemania nazi o, quizá, precisamente como consecuencia de ella, asumió que sólo una reconciliación duradera de ambos países podía formar la base de una Europa unida. Deportado a Alemania en 1940, dos años más tarde huyó y se unió a la resistencia francesa. A pesar de ello, no mostró ningún resentimiento cuando, finalizada la guerra, fue nombrado Ministro de Asuntos Exteriores.

En cooperación con Jean Monnet, elaboró el internacionalmente célebre Plan Schuman publicado el 9 de mayo de 1950, fecha que hoy se considera de nacimiento de la Unión Europea. Propuso el control conjunto de la producción de carbón y acero, las materias primas más importantes de la industria armamentista. La idea básica era que quien no tuviera control sobre la producción de carbón y acero no podría sostener una guerra.

Schuman informó del Plan al Canciller alemán Adenauer, quien vio inmediatamente la ocasión de crear una Europa pacífica y dio su aprobación. De esta manera comenzó Europa, como una iniciativa de paz.

Schuman también apoyó la formación de una política europea común de defensa y, a partir de 1958-1960, fue Presidente del Parlamento Europeo.

Declaración de Schuman

En su discurso, Schuman proponía la creación de una comunidad franco-alemana para aprovechar conjuntamente el carbón y el acero de los dos países. Una vez en funcionamiento, se ampliaría la comunidad a otros países europeos para formar un espacio de libre circulación de personas, mercancías y capital. Este sistema cruzado de intereses evitaría la posibilidad de una nueva guerra.

Las bases en las que Schuman plasmaba la oferta del Gobierno francés para la constitución de esta comunidad eran las siguientes:

• Creación de una Alta Autoridad cuyas decisiones obligarían a los países que se adhiriesen a la comunidad.
• La Alta Autoridad tendría como objetivo:
o La modernización de la producción del carbón y del acero
o El incremento de su calidad.
o El suministro del carbón y del acero en idénticas condiciones tanto a Francia como a Alemania, así como a los países que se adhiriesen.
o El desarrollo de un sistema común de exportación hacia los demás países no integrantes.
o La mejora y equiparación de las condiciones de los trabajadores de ambas industrias.
• Una liberación inmediata de los aranceles de ambos productos en los países de la comunidad.

La declaración finalizó plasmándose en el Tratado de París, firmado el 18 de abril de 1951 por el que se creó la Comunidad Europea del Carbón y del Acero (CECA), firmado no sólo por Francia y Alemania sino por cuatro países más: Bélgica, Italia, Luxemburgo y los Países Bajos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario